viernes, 14 de diciembre de 2012

Consejos para comer sano en Navidad

Llegan unas fechas fatídicas para la báscula, que sea Navidad no es motivo ni justificación para engordar, cuesta menos no pasarse, que pasarse y luego tener que poner remedio. Aquí os dejo unos consejos sanos dados por expertos en nutrición que seguro os serán muy útiles a la hora de ponerse delante de una comilona navideña.



  • Comienza ya mismo una dieta de control para los días anteriores y posteriores a las fiestas, que evite el exceso de grasas, alcohol y féculas.
  • Igualmente, imponte días de restricción antes y después de las fechas más señaladas, comiendo menos de lo habitual.
  • Cocina ligero, recupera las recetas tradicionales que combinan la carne o el pescado con verduras  en la medida de lo posible, y no hagas cantidades excesivas por temor a quedarte corto.
  • Empieza sin hambre. Si antes de la comida de Navidad nos tomamos un par de piezas de fruta, empezaremos la comida parcialmente saciados y comeremos con menos ansia.
  • Para el postre recurre preferentemente a las frutas de temporada como piña, chirimoya o a los postres caseros: peras al vino, manzanas asadas con canela, tarta de fresas, macedonia, etc.
  • No es necesario privarse de los dulces típicamente navideños como el turrón o el mazapán, pero dado que aportan muchas calorías es importante consumirlos de una forma moderada y puntual.
  • Limita los posibles excesos alimentarios exclusivamente a los días de fiesta (Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo y Reyes), y no los extiendas a los días restantes que quedan entre uno y otro festivo. No debemos, por ejemplo, consumir lo que quedó de la comida de Navidad durante los tres días siguientes, o sacar la consabida fuente de turrones y mazapanes para cerrar cualquier cena de este periodo.
  • Mentalízate: piensa en lo que va a costarte perder el peso ganado.

Esta última recomendación es quizá las más importante pues no es lo mismo incrementar nuestro peso en medio kilo que en tres o cuatro kilos durante estas fiestas. Perderlos después probablemente te supondrá un esfuerzo mucho mayor que la satisfacción que te supuso el exceso cometido. Así que... disfruta plenamente de las fiestas navideñas, pero sin caer en los grandes excesos alimentarios que suelen acompañarlas!!!
 
Fuente: Viviendo Sanos












No hay comentarios:

Publicar un comentario